La poesía como herramienta de liberación de personas privadas de libertad. Entrevista a Liliana de Yo No Fui (Argentina)

Entrevista a Liliana Cabrera de la organización social Yo No Fui (Argentina), en el marco del Primer Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe. “Críticas de los sistema penal y penitenciario hacia una justicia feminista”. En este encuentro se presentarán ponencias, testimonios, talleres, socialización de experiencias, muestras artísticas, fotográficas y audiovisuales, en la Universidad Central del Ecuador y Universidad Andina Simón Bolívar del 26 al 28 de septiembre de 2019.

Es miércoles  son casi las 21:00, luego de haber preparado una cena (pasta con embutidos y salsa bolognesa) en casa de una de las organizadoras del encuentro. Nos disponemos a conversar Liliana y yo.

El viaje ha sido largo, la conversación fluye, pero el cansancio es evidente, intentamos que sea corta la entrevista.

¿Qué es Yo No Fui?

Yo No Fui, es una organización social que trabaja en proyectos artísticos y productivos en el que participamos mujeres que pasamos por la privación de la libertad.

¿En la organización que papel desempeña Liliana ?

Yo soy docente del taller de poesía, literatura y cine, y parte del equipo de comunicación, además doy el taller de Sistemas informáticos a compañeras que han pasado por la privación de libertad.

Empezamos en el 2002, María Medrano, quien ahora es coordinadora general de Yo No Fui, trabajaba en un juzgado penal y le tocaba tomar declaración a una chica de Bielorrusia – era su primera declaración indagatoria- María se conmovió mucho por esta situación. La chica venía por una causa de estupefacientes, que es la causa por la que caen muchas mujeres, la chica de Bielorrusia estaba pasando por una situación de indefensión, no hablaba español y estaba entrando el invierno, así que María empezó a visitarle a la cárcel. Entre visita y visita conoce la realidad carcelaria y decide que no quiere seguir trabajando en el juzgado de ejecución penal. María era poeta y gana un premio, dentro de este le ofrecen dar un taller en una cárcel o en un hospital psiquiátrico, y ese fue el germen que da inicio a Yo No Fui.

¿La poesía fue el inicio de todo entonces?

Las compañeras privadas de libertad que fueron parte del taller, se juntaron y comenzaron a pensar que se puede hacer afuera para vivir. Todas aprendieron a coser estando recluidas, así que se pensó en un principio en realizar diseño textil, encuadernación. Luego fuimos muchísimas más y ahora somos una Cooperativa de trabajo además de ser una organización civil.

Esto nos permitió reflexionar el modo como nos pensamos nosotras, y pensar en feminismo. Coincidimos en cuestionar el modelo penitenciario y su “re” habilitación, “re” inserción, “Re” adaptación. Buscamos nuevas formas de nombrar acorde a lo que íbamos y vamos pensando.

¿Cuál es Modelo del sistema penitenciario en Argentina?

Y bueno la Argentina tiene dos regímenes penitenciarios. El régimen provincial y el régimen federal, la diferencia entre el uno y el otro tiene que ver con el monitoreo que existe sobre cada persona privada de la libertad, las condiciones que tienen que ver con una lógica de jurisdicción y con algunos delitos puntuales.

Las prisiones federales tienen mejores condiciones de lo que podría ser el sistema penitenciario provincial.
En las cárceles federales existe una remuneración por el trabajo que se realice, en la cárcel provincial el trabajo es voluntario casi en condiciones de esclavitud.

Las políticas del gobierno nacional han empeorado las condiciones de reclusión. En las cárceles argentinas existen personas detenidas por algo que denominamos ‘chiquitaje’ y que se refiere a las privadas de libertad por delitos menores que podrían ser solucionados por otro tipo de vía. Nosotras como Yo No Fui, nos pensamos el tema de la penalización, lo cuestionamos. Existe un montón de vulneraciones para quienes han sido privadas de la libertad.

Nosotras vemos que la cárcel no sirve para nada

¿Podemos decir que se criminaliza la pobreza?

Totalmente, se criminaliza, además, la falta de redes. Por ejemplo la gran cantidad de mujeres que reinciden es por que no tuvieron la posibilidad de salir a otros espacios, de fortalecer redes de apoyo, generar vínculos, los pocos que quedan se van cercenando cuando entra una persona a la cárcel y se va quedando sola, sin la posibilidad de ir creando otro tipo de afectos.

Ahí radica la importancia de rodearse de otros espacios que superen la dicotomía de estar adentro o afuera.

Las cárceles como expresión del Estado patriarcal, podemos pensar la cárcel como un reflejo de lo que sucede afuera, existe la misma cantidad de violencia, las mismas injusticias, la violencia machista, un sistema judicial que en muchos casos no sirve por que está atravesado por el patriarcado desde esa mirada clasista.

Como Yo No Fui, cuestionamos la forma como se mira a las personas privadas de libertad, no solamente desde el Estado si no inclusive desde otras organizaciones, hay una mirada, quizás desde lo tutorial y eso es jodido, por que es una reproducción de lo que hace el sistema, el sistema intenta infantilizar, por eso lo cuestionamos, lo repensamos, para superar la visión de victimas o victimarias, siempre hay esos dos polos. A las personas privadas de la libertad se las ve como carentes de potencia y no es así, en lo absoluto.

El tema pasa por tener oportunidades, si una persona está acompañada es difícil que vuelva a reincidir, se les va creando otro proyecto de vida, invertir toda esa potencia creativa para que ella no termine en un penal.

¿Cuál es el objetivo de estar acá en este encuentro?

Nuestra presencia acá en Ecuador en este Primer Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe se basa en la creación de redes, esto para nosotras es un eje fundamental dentro de Yo No Fui, sola no se llega a ningún lado, colectivamente somos una fuerza, cuando somos muchas, por que realmente si pensamos en las luchas que nos atraviesan, nos atraviesan a toda América Latina, por ejemplo el aborto legal, contra la violencia patriarcal, esos son ejes transversales que nos unen con otras compañeras de otras latitudes.

El tiempo corre y le digo a Liliana…imposibe no preguntar por Cristina Kirchner y Mauricio Macri y su política carcelaria.

¿Cuál es la herencia del gobierno de Macri?

La politica entendida desde el partidismo, siempre trae algo bajo el poncho – decía mi padre- (risas), si nos ponemos a analizar con las personas privada de libertad en cada gobierno, podemos sin lugar a dudas reconocer que tanto en el anterior gobierno como en este, las personas vieron cercenados sus derechos.

Con Cristina Kirchner por ejemplo un 23 de mayo en horas de la madrugada se produjo el traslado masivo de mujeres detenidas en la Unidad 31 de Ezeiza, al Complejo IV de la misma localidad. El personal penitenciario masculino llevó a cabo el traslado (con gran violencia) El lugar de las mujeres trasladadas fue destinado a condenados y procesados por crímenes de lesa humanidad, primero fueron 50, a la fecha el número de varones trasladados asciende a 100.

Esto demuestra la máxima selectividad del sistema punitivista que avanza con medidas de esta índole respecto a las mujeres que suelen ser criminalizadas por delitos menores, para favorecer a presos por delitos gravísimos contra la humanidad, cuyos privilegios se han traducido en años de impunidad que ahora se prorrogan en un tratamiento diferencial dentro del sistema penitenciario.

Ahora con Macri, hubo un retroceso en cuanto a los derechos humanos, existe más represión dentro y fuera de la cárcel, se reprime a la gente que está viviendo en la calle.

Argentina está en el puesto número 16 en el mundo según su tasa de encarcelamiento, con 194 casos cada 100.000 habitantes. Y la cifra sigue subiendo. Para paliar el déficit habitacional, el servicio penitenciario aplica estrategias variadas, como sumar colchones en calabozos o convertir gimnasios en nuevos pabellones.

La entrevista termina, hablamos un poco en off sobre la cena, el encuentro, el frío clima de Quito, nos abrazamos y damos por terminada la entrevista.

Tefa de Mujeres de Frente infló ya su cama, la noche cayó; me despido deseandoles muchos éxitos en el encuentro y con la promesa de vernos en la fiesta, seguir charlando de este y otros temas.

¿Te gustaría conocer más de Yo No Fui y de Liliana ?

Recomendamos ver este video y visitar su sitio web.

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