En una rueda de prensa celebrada esta mañana, alrededor de 80 personas se congregaron frente al edificio del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social, en la Av. 10 de Agosto, convocados por el Frente Nacional por un nuevo IESS y otras organizaciones y colectivos de jubilados. El motivo de esta reunión fue manifestar su preocupación respecto al informe elaborado por la comisión encargada de reformar el fondo de pensiones del Seguro Social, la cual está conformada por diez miembros, de estos destaca Augusto de la Torre y Pablo Lucio Paredes, economistas de corte neoliberal que siempre están sugiriendo cumplir los pedidos del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial.
Se prevé que este informe sea presentado al gobierno de Guillermo Lasso el próximo 3 de julio, y posteriormente socializado a partir del 4 de julio en las provincias de Pichincha, Guayas, Manabí y Azuay. La intención de estas organizaciones sociales es que el informe de la comisión se envíe como un decreto-ley de carácter económico urgente a la Corte Constitucional.
Según Henry Llanes, presidente del Frente Nacional por un nuevo IESS, esta posible reforma en la seguridad social representa un retroceso en los derechos de los jubilados. Aunque no se plantea un aumento en los aportes al seguro social, se propone internamente cambios regresivos, como el incremento gradual en el número de años trabajados para el cobro de la pensión. El informe de la comisión sugiere establecer un promedio de 20 a 25 años de trabajo en lugar del promedio de los 5 mejores años de sueldos y salarios. Según Llanes, esto implicaría una reducción del 75% al 55%, lo cual perjudicaría a los nuevos jubilados. Además, se propone un aumento de 30 a 35 años de aportes, lo que resultaría en que una persona se jubile a los 70 años de edad.
Llanes señala que Augusto de la Torre justifica esta reforma argumentando que los jubilados no contribuyen al sistema de salud, pero se benefician de todos los servicios. Según Llanes, este discurso repetido constantemente por De la Torre busca que los jubilados acepten esta reforma como una solución a la grave crisis actual del IESS. Para Llanes, esto se debe principalmente al incumplimiento de la deuda que el Estado tiene con la Seguridad Social desde gobiernos anteriores.
Asimismo, Llanes menciona que la descapitalización de la Seguridad Social es resultado de factores como la politización del IESS como un botín político y electoral durante el gobierno de Correa. Esto ha dejado una deuda total del Estado con la Seguridad Social que alcanza los 31 millones de dólares.
Ante esta situación, las organizaciones de jubilados proponen como alternativa la transferencia del Banco del Pacífico como parte de la deuda estatal. Además, sugieren que el IESS sea uno de los accionistas de los fondos petroleros y de telecomunicaciones, y que el Banco del IESS sea considerado de primer piso.
Para finalizar, las organizaciones de jubilados anunciaron que, en caso de que avance la reforma propuesta por la comisión de pensiones, tomarán medidas de hecho y se tomarán, calles y plazas, si es necesario.
Be the first to comment