26 millones de empleos se perdieron en Latinoamérica en 2020

Según cifras de la Organización Mundial del Trabajo, la informalidad golpea a cerca de 140 millones de trabajadores en la región, casi el 53% de los ocupados.

La propagación del COVID-19 creó una crisis económica a nivel mundial. El confinamiento de la población, medida adoptada para frenar la propagación del virus, afectó a todos los sectores de la economía; asimismo, produjo que la mayoría de las empresas presenten problemas de liquidez y con ello dificultades para mantener su nómina de trabajadores.

América Latina y el Caribe perdieron unos 26 millones de puestos de trabajo en el 2020, a raíz de la caída a 51,7 % de la tasa promedio de ocupación durante la pandemia, una reducción de cinco puntos porcentuales, reveló la Oficina Internacional del Trabajo (OIT).

Latinoamérica tiene cifras importantes de desempleo y en este sentido, se hace necesario un empleo digno y dignificante que brinde la oportunidad de salir adelante a todos los ciudadanos de la región.

La llegada de las plataformas ha revolucionado el mundo del empleo, pero también ha ampliado las brechas ocasionadas por los vacíos jurídicos que hacen que nuevos jugadores entren en el partido con reglas diferentes, generando mayor informalidad. Las plataformas prometen un empleo fácil y rápido. Como intermediarias, se lavan las manos de las obligaciones que por ley una empresa debería tener con quienes acceden al trabajo. De hecho, las intermediarias o empresas temporales son también objeto de obligaciones con sus empleados.

Decía el economista Hernando de Soto que no hay que formalizar la informalidad sino informalizar la formalidad. Estos grandes problemas son fruto de Estados grandes que quieren controlarlo todo y que, además, al querer ordenar todo, desordenan todo, dejando grandes vacíos que generan distorsiones y desigualdad de oportunidades a la hora de competir.

Ecuador Today se contactó vía telefónica con Iván Bastidas Presidente de La Confederación Nacional de Servidores Públicos del Ecuador (CONASEP), quien nos manifiesta que: “De la pérdida de 26 millones de empleos, un 80 por ciento, es decir más de 20 millones de personas salieron de la fuerza de trabajo” Así mismo manifestó que: “A escala mundial, las mujeres se han visto más afectadas que los hombres, por la disminución de la ocupación en todas las regiones y con respecto a todos los grupos de la fuerza de trabajo, las mujeres han sido más proclives que los hombres, en el plano económico durante esta crisis”.

Roberto Rodríguez, presidente de la Federación Nacional de Trabajadores Universitarios y Politécnicos del Ecuador (FENATUPE), manifestó que: “Los más afectados en esta pandemia hemos sido los trabajadores, que a más de haber sido despedidos de los trabajos, hemos sido víctimas de la enfermedad, directamente nosotros o incluso nuestros familiares, incidiendo en la economía familiar por la compra de medicamentos necesarios para combatir la enfermedad. La pérdida de empleos sufrida por los millones de trabajadores el mundo y en particular en américa latina, se convierte en la mayor crisis humanitaria que hoy estamos viviendo.”

Entrevista a Iván Bastidas: